La señora Laura Henderson (interpretada genialmente por Judi Dench) acaba de enviudar y regresar a London después de pasar la segunda mitad de su vida en la India. Adinerada y aburrida, decide hacer lo que cualquier doña de su grupo de edad haría en la misma situación y se consigue un hobby para pasar el tiempo. Claro, que siendo un poquitín excéntrica la señora, en vez de comprarse un gato, enseñarse a tejer o ser experta pastelera, se compra un teatro. Su falta de experiencia no es limitante y es cuando contrata al buen Vivian Van Damm (nada que ver con el peleador golpea-pelotas favorito de todos) interpretado por Bob Hoskins. El manejo del teatro, la llegada de la segunda gran guerra, y el ver como se manejan los duelos de poder entre nuestros dos personajes principales son las causas por las que esta cinta es bastante entretenida… bueno, eso y el hecho de que podremos ver lindas chicas inglesas desnudas durante varias partes de la cinta.
La señora Dench fue nominada entre otros premios, al Oscar y al Bafta como mejor actriz. Desafortunadamente no logro ninguno de esos premios aunque en la cinta podemos ver el porqué. Su interpretación de una frívola señora de alta sociedad cuyo mayor contacto con el resto del mundo es a través de reuniones de beneficencia es bastante buena, ya que además de presentarte este aspecto, hace su personaje bastante agradable y relatable. Algo así como ver a la tía rica sangrona que finge interesarse en tu vida aunque solo te haya visto 3 veces en 20 años. Su contraparte es el genial Bob Hoskins, quien se gana de antemano la simpatía del público al ser la versión desempleada pero con orgullo y amor propio del emprendedor con experiencia que pasa tiempos difíciles.
La química entre ambos personajes es muy buena y las discusiones donde hay reacciones pasivas/agresivas son geniales. Las expectativas que tenía la Sra. Henderson para con el buen Van Damm y la manera en que se afronta con la realidad son simplemente deliciosas.
La musicalización es bastante buena (¡quiero el soundtrack!) así como los vestuarios… o tal vez debería decir los desnudos, ya que hay varios, aunque muy artísticos. Y gracias a dios (y al buen Van Damm) había un barbero en el cast, así que las damas que asistieron a la cinta no tuvieron que aguantarnos a los caballeros al grito de “¡pelos, pelos, pelos!”.
Una cinta entretenida, pero donde la dirección pudo haber sido trabajada un poco más, cosa que fue compensada con creces en The Queen. Sin embargo, los personajes principales son los que nos llevan toda la cinta de una manera divertida, aunque con sus momentos difíciles que humanizan a nuestros personajes, aunque hay veces en que no sabemos si se están mostrando como son o como quieran que los veamos, con tal de manipularnos. Por otra parte es genial ver una cinta donde los protagonistas no son adultos jóvenes con problemas existenciales o adolescentes calenturientos con problemas sociales.
Conclusión: Cómo dice una de las rolas de la cinta: “Goody, goody!”
2 Comentarios
:)
Me gustan tus reviews...
saludos, neneee
Sobre el final, no te apures... Caen bombas y todos se mueren.
¡Gracias por los coments, niña! ¡Saludos!