Churros y Palomitas
Temporada 3, Episodio 6
En donde vemos lo bueno, lo malo y lo feo.
Parte 1 – Lo malo
Lunes en la tarde. Gracias al hecho de fue día feriado tuve la rara oportunidad de aventarme varias películas en el cine. Armado con mi mochila botanera, algo de efectivo, bolsitas de plástico por si me ganan las ganas de ir al baño a media película y la compañía de mi querida y nunca bien ponderada Dalia (la cual no estaba muy de acuerdo con mi previsión de las bolsitas de plástico para las emergencias) es que nos dispusimos a ver que había de interesante en el cine.
La primera de la tarde fue Epic Movie (Una Loca Película Épica). Con el antecedente de jaladas tales como Scary Movie (de la cual hubo 4), Not another teen movie y Date Movie (la cual era tan mala que hasta la chamba me costo) es que llega la nueva satira hollywodeense… ahora enfocada en cintas épicas.
La historia de cuatro huerfanos inicia con Lucy (Jayma Mays) quien es la hija de un curador del Louvre y después de una persecución de un afroamericano pintado de albino, encuentra un ticket dorado en un chocolate. Edward (Kart Penn) abandona su orfanato después de que el clon barato del clon simpático de Fray Tormenta al mismo tiempo que Meter (Adam Campbell) abandona su escuela para jóvenes especiales, luego de ser el puerquito de los cool guys mutantes y finalmente Susan (Faune A. Chambers) abandona un avión lleno de serpientes. Ellos juntos asisten a una sensacional fábrica de chocolates donde sus historias se entremezclaran con la ausencia de creatividad de los autores.
¿Qué se obtiene si mezclamos Narnia, Willy Wonka, Superman, los Piratas del Caribe, Superman, Nacho Libre, Snakes on a Plane y varias más historias y sus personajes junto a dos guionistas/directores mediocres? La peor película de lo que va del año. Con una duración de apenas 86 minutos con todo y créditos y chistes tan estúpidos, parodias tan mal hechas y un humor tan malo que para entenderlo se necesitaría ver reality shows de MTV, Telerisa y TV Zapoteca durante 6 meses sin dormir, hasta que no quedaran neuronas utilizables. No entrare en detalles pero aparentemente la cinta consideraba todo como parodiable dentro de su épica… hasta Borat. Ni el peor show de comediantes tercer mundistas es tan malo como la cinta… Si aun a pesar de esto quieren verla, aguántense los créditos y verán muestras de humor igual de sofisticados como un musical con los Umpa Lumpas que se grabo y simplemente no encontraron como meterlo en la cinta así como un gag con un Mel Gibson en la cárcel.
Conclusión: Recomendable si aguantan los recuentos de fin de año de Ventaneando o son masoquistas mentales. Vayan a verla con alguien que les deba dinero y salgan al baño a los 5 minutos… Les garantizo que sufrira.
P
arte 2 – Lo bueno Decepcionado de la vida y después de haberme chutado tremendo churro como Epic Movie (y luego de haber recibido tremendos cachetadones por parte de mi acompañante para ver si salía del coma ocasionado por la cinta antes mencionada) es que decidimos ver algo que rescatara la tarde. Afortunadamente se encuentra en cartelera Stranger than Fiction (Mas extraño que la ficción), cinta inteligentemente escrita por Zach Helm y dirigida por el talachero Marc Foster.
Will Ferrer interpreta a Harold Crick, un auditor de hacienda que de pronto empieza a escuchar voces en su cabeza. Lo malo no es que estas voces le ordenan hacer algo, sino que aparentemente narran su vida… o lo que podría ocurrir con esta…. O como termina.
¿Alguna vez han sentido que las situaciones de sus vidas son parte de una telenovela o un melodrama de las 6 de la tarde? Cuando a veces me ocurre esto, me dan ganas de ir con el productor de mi vida y pedirle que cambie de guionista (uno de acción o de historias épicas no estaría nada mal, aunque no me quejo de los momentos románticos). Ahora bien, ¿qué pasa cuando efectivamente somos parte de una ficción? Esta es la línea central de la cinta.
Despegándonos del punto de vista del narrador, nos metemos literalmente en la vida de Harold quien al ver que aparentemente es parte de una obra literaria, decide averiguar como continuaría o por que es de esta manera. En el desarrollo y el descubrimiento si es una tragedia o una comedia, encuentra en quien menos esperaba el amor de su vida, así como situaciones que van desde lo divertido a lo traumatizante.
Debo de confesar que no soy fan de Will Ferrell. Su humor rara vez me parece atrayente, sin embargo, al igual que Adam Sandler, si le pones una historia atractiva y los diriges de manera competente, puedes tener obras memorables. A esto agreguenle el encanto de Maggie Gyllenhaal como el posible interés amoroso y el conflicto con la “creadora” de su vida Karen Eiffel (Emma Thompson).
Tal vez la historia no llegue a los niveles de cualquier obra Kauffkiana (léase El Ladrón de Orquideas o Eterno Resplandor de una Mente sin Recuerdos) sin embargo es bastante buena. Una perspectiva fresca y una empatía con un personaje que se siente impotente ante los caprichos del autor, al mismo tiempo de que se vive y una existencia rutinaria regida por el reloj y el trabajo hace de esta una cinta bastante recomendable. Confieso que a pesar de saber para donde se dirige la historia, al momento de las risas o las lagrimas, uno en verdad se siente parte de la cinta y sufre o ríe con los personajes… A mi hasta lagrimitas me salieron en los momentos trágicos.
Conclusión: Si quieren una comedia sofisticada que les haga pensar al mismo tiempo que reír o llorar, esta es la cinta. Mención aparte para el soundtrack que esta bastante bueno.
Parte 3 – Lo feo
Dicen que los defectos que más odiamos de nuestros semejantes son los que nosotros tenemos mas marcados. De la misma manera, de algún lado debimos haber sacado semejantes cualidades, y es por eso que tanto en la realidad como en las pantallas tenemos tantas familias disfuncionales tan atrayentes a nosotros los espectadores… Tan solo los Simpson llevan más de 10 años al aire y con una película próxima a estrenarse. El lado feo de nuestra realidad es bastante atrayente para ser tan desdeñable.
Little Miss Sunshine es la historia de la conflictiva familia americana compuesta por el padre fracasado, la madre divorciable, el abuelo drogadicto, el tío gay suicida, el hijo emo y la hija que acaba de recibir la oportunidad de participar en el concurso de la Pequeña Señorita Sunshine, y por quien la familia esta dispuesta a hacer un largo viaje en una vieja camioneta con tal de ver realizado el sueño de la niña.
Con un casting estelar que va desde Greg Kinnear pasando Toni Collete y Alan Arkin es que esta historia nos muestra la vida cotidiana de esta familia, con todo y sus conflictos y anhelos. La dirección a cargo de Jonathan Dayton y Valerie Faris nos da una dimensionalidad a una realidad tan cercana haciendo interesantes elementos tan cotidianos como la cena de pollo frito de la cual el abuelo junkie esta mas que harto.
Todos los personajes, así como sus participaciones, están perfectamente balanceados. ¿Hay un personaje que no habla? También hay una razón para esto, y no necesita diálogos para brillar. ¿Un personaje no aparece fisicamente en más de la mitad de la película? Su presencia se sentirá hasta el final mismo al mismo tiempo que entonamos y bailamos canciones tan memorables como “Super Freak”. La ridiculez y la mofa de nuestra triste realidad también se hace presente en momentos tan bellos como que la camioneta no prenda y halla que empujarla y correr para abordarla como en el intento de soborno del oficial de la policía con revistas pornográficas.
Una cinta que retrata nuestro lado “feo”, el lado humano de cada familia y cada sociedad. Sin embargo, es precisamente que a través de análisis y confrontamientos con estas realidades que también llega un momento de catarsis purificadora donde tal vez no se llegue a un perfeccionamiento personal, pero vaya que forja identidades.
Conclusión: Recomendable para todas las edades. Más recomendable si se piensa participar en algún concurso de belleza y no se sabe que hacer en la prueba de talentos.
