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22 de septiembre de 2006

Temporada 2, Episodio 4 - Efectos Secundarios en el Hoyo

En donde se presenta la causa de que el cine
mexicano salga del hoyo y se ven sus efectos secundarios.

El cine mexicano es algo que en los últimos años daba más tristeza que gusto ir a ver. Gracias a que la gente prefiere ver una película de 20 a 25 pesos mal grabada y con pésimo audio, el cine cada vez es un negocio menos redituable. ¿Qué pasa con esta industria en un país donde durante años fue floreciente o al menos se realizaba una producción considerable, llegando a tener más de 200 estrenos al año? Obviamente le pega directamente en el bolsillo. Ahora imagínense los efectos que tendría sobre un país que no tiene industria y que con trabajo se llega a la decena de películas producidas al año. No hay apoyo de las instituciones oficiales (y en cierta manera ni deberían darlo, aunque la mayoría de las veces respaldan producciones mediocres) y a la gente no le interesa tanto ir a las salas de cine, aunque el costo del boleto pueda ser igual al de ver un debedé comprado en el tianguis. A pesar de este entorno tan desolador, llegaron a nuestra cartelera dos cintas que me dan un poco de esperanza en que a pesar de lo que se tiene en contra, se pueden sacar producciones bien hechas. Con causas muy distintas y condiciones radicalmente diferentes, están en nuestra cartelera “En el hoyo” de Juan Carlos Rulfo y Efectos Secundarios de Issa López. Las películas son dos opuestos bastante interesantes.

En El Hoyo es un documental donde Rulfo (de quien tengo el honor de decir que fue mi maestro en un par de cursos de producción) retrata las vidas de las personas envueltas en la creación del segundo piso del periférico, allá en la capirucha. Siendo completamente honesto, cuando escuche que estaba apenas desarrollando dicho proyecto, lo primero que me vino a la mente es ”Necesita varo”. Juan es en mi opinión el mejor documentalista mexicano, ya que es uno de los pocos realizadores que pueden plasmar una identidad muy personal y al mismo tiempo capturar el alma de los participantes en su cinta. Su primer producción, “El abuelo Cheno y otras historias” así como su opera prima “Del Olvido al No me Acuerdo” son obras donde cautiva con una narrativa en espiral que te acerca de manera impresionante a la vida de México y de las personas que dan pauta a esto (tanto el abuelo como padre de Juan). En esta ocasión, en vez de hacer un viaje interiorista al pasado, Juan nos trae lo que viene siendo el retrato de un grupo de obreros envueltos en la creación de la magna obra capitalina. Es curioso como una película casi sin apoyo económico nacional (pero con apoyo extranjero) puede mostrar lo mejor y lo colorido de nuestra gente. Se dice que para que un puente se construya y sirva de vínculo entre dos zonas, el diablo reclama un alma a cambio. Lo importante no es tanto la construcción, que después se pueda utilizar como trampolín político de progreso. Lo importante es cuanto sudor, cuanto humor, cuantas vidas y toda el alma impregnada en esa obra. Entre albures, cotorreo, tomas impresionantes (por la dificultad en que consistió que el creador se trepara a capturar las imágenes) y un final que capta en todo su apogeo lo que abarca la construcción, es que Juan nos comparte un cachito del alma de nuestro país. En verdad una obra hecha con “bien harto feeling” y con harto producto de gallina, bastante recomendable.

Por otra parte, Efectos Secundarios tiene la pequeña ventaja de ser la primer coproducción mexicana donde se invierte capital por parte de una productora fuerte, en este caso Warner Enterteinment. Issa López, la guionista y directora de la cinta puede ser recordada por haber escrito antes Ladies Night, la cual confieso que no la ví (el título tiene demasiadas feromonas para mi gusto) pero debo reconocerla que sabe escribir bien, ya que en Efectos Secundarios nos trae una historia bastante redonda donde cuatro personajes se envuelven entre romances, rechazos, humor y hasta el secreto de la vida. A pesar de que se plantea que la vida empieza a los cuarentas y que los cincuentas son los nuevos cuarenta (con respecto a la edad), la crisis de los años treinta en la cual uno debe de plantearse o replantearse las metas de su vida. Este tema, en mi opinión, fue muy bien retratado en la película de Garden State, de Zach Braff (donde casi casi vi mi vida retratada) y en México se medio plasmo con Friends en Polanco, que diga, con Sexo, Pudor y Lágrimas. En esta ocasión viene a través de los ojos de Issa, en una comedia bastante disfrutable y con un guión y actuaciones bastante sólidos. A pesar que de repente tiene algunas pretensiones el desarrollo, se lleva de buena manera dándonos una buena película (y era justo, por que es la película mexicana que se ha lanzado con el mayor número de copias en nuestro país).

En conclusión, dos opciones bastante disfrutables. Sigo esperando con ansias Babel y sobretodo El Laberinto del Fauno… y ojala que Fernando Sariñana no se le ocurra hacer más películas.

Recuerden que si quieren mandarnos sus comentarios, críticas, quejas o sugerencias, pueden hacerlo en http://churrosypalomitasonlain.blogspot.com/ donde como siempre, estamos más que felices de leer a nuestros lectores. Recuerden que ya nos pueden leer de manera semanal en el Heraldo de León, a veces los miércoles y a veces los jueves... y a veces otros días.

13 de septiembre de 2006

Crónica de lo inevitable y lo irremediable - Snakes on a Plane

Imagínate una historia que de escuchar el mismo nombre es ridícula, agrégale todos los clichés de personajes de películas clase B (osease, de bajo presupuesto), súmale altas expectativas y rumores generados por Internet, agregale una estrella que se caracteriza por patear traseros y ser un tipo rudo, cuécela a fuego lento con chistes, estereotipos y pitorreo sobre otras películas y tendrás una de las películas más divertidas que he visto en mucho tiempo.

Después de varias semanas de espera, finalmente llega a nuestras pantallas una película que he estado esperando con ansias desde que se anuncio: Snakes on a Plane (Serpientes a Bordo). El nombre puede sonar ridículo, como de esas películas que llegan directamente a las rentas en video. ¿La premisa? Sean Jones (interpretado por Nathan Phillips) atestigua un asesinato cometido por uno de los jefes del crimen más peligrosos de Hawai. Para protegerlo, el agente espacial, que diga, especial Nelville Flynn (Samuel L. Jackson) lo lleva en avión rumbo a Lo Ángeles, desafortunadamente no contaban con la astucia del malo, que demostrando su colmillo (y veneno) decide que la mejor manera de encargarse del testigo incómodo es llenarle el avión en el que viaja de serpientes venenosas.
Primero que nada, la premisa suena ridícula… ¿Qué no es mas fácil tratar de echarse al testigo antes que aborde el avión?, además…. ¿con serpientes?, por increíble que parezca al desarrollarse la película, uno llega a comprender por que las serpientes son la neta del planeta al momento de querer ejecutarse a alguien. Los personajes son tan clichés como telenovela de teve zapoteca. De entrada el personaje principal es un agente del FBI rudo, rudo y más rudo que Arturo Rivera, así que por lógica debe ser el chido de la película. De igual manera los personajes de la película son estereotipos de película gringa a su máxima expresión. ¿Alguien pidió una rubia descerebrada con perrito pero bien guapa? ¡Concedido!, ¿alguien quiere ver a la estrellita musical con delirios de grandeza que aprenderá humildad durante la historia?, ahí lo tienen. Y así podemos seguirnos con varios por el estilo.

Usar estereotipos es fácil, pero es difícil usarlos de manera inteligente. Ahí tenemos un montón de películas basura tales como Sexy Movie, Scary Movie, Not Another Teen Movie y Sin Ton ni Sonia (esa última no se por que la incluyo, pero bueno). Sin embargo, el director David R. Ellis (Celular) y los guionistas John Hefferman y Sebastián Gutiérrez saben utilizarlos de manera por demás inteligente, no ridiculizándolos más (a final de cuentas ya sabemos como van a actuar, sino acomodándolos como piezas de ajedrez en el juego. Además, las mismas acciones son previsibles, pero no por eso menos divertidas. Por ejemplo, si un tipo va a orinar en el avión y sabemos que las serpientes van a salir por el lugar menos esperado, ¿cuál es la parte más lógica donde podrían morder al pobre individuo?, y fijense que si no ocurriera de esa manera, me sentiría increíblemente decepcionado, es como ver sexy comedias mexicanas y no escuchar ningún albur por que el guionista quiere establecer a Alberto Rojas como el equivalente a Damián Alcázar (cada uno muy bueno en su respectiva área de actuación) simplemente por que tiene pretensiones inconexas.

Esa es precisamente la mayor ventaja de Serpientes a Bordo: no es pretensiosa. Se sabe como película que solo quiere entretener, y la verdad lo hace. Tenía muchísimo sin divertirme tanto con una cinta, además de que el soundtrack (disponible en la Music Store de atunes) está sensacional. Si les gusta ver este tipo de cintas, es muy recomendable, si quieren ver algo con “mayor contenido intelectual”, tenemos la muestra internacional de Cine (que de hecho vengo de ver Allegro… muy recomendable también).
Como brevario cultural, el director quería que la frase de “Snakes on a Plane” se empezara a utilizar como frase típica para una situación inevitable o irresolvible, sería algo como si un cuate te comenta “fijate que me cortó mi novia”, ¿Qué le respondes?, ¡Fácil! Es como tener serpientes a bordo… no puedes hacer nada para solucionarlo.
Cintos Piteados

450: Cantidad de serpientes utilizadas en la película, incluyendo un Pitón (sin albur) de 22 pies de largo.
3: Para despistar a los incautos, esta cinta se manejo como si fuera a ser la película
121: Los productores querían cambiarle el título a la película por el de “Vuelo 121”, afortunadamente Samuel L Jackson les dijo: “A mi me contrataron para una película llamada Snakes on a Plane, y yo voy a actuar en una película llamada Snakes on a Plane, si no les parece, búsquense otro actor…”
18: Edad recomendada para ver esta cinta. Secuencias de sexo, humor adulto y otras cosas le fueron agregadas, así como dialogo mas fuerte (como la sensacional frase de Mr Jackson sobre las serpientes). Todo esto para complacer a los fans que esperábamos la película. ¡Dios bendiga a los fans de hueso colorado!
Recuerden que si quieren escribirnos, platicarnos, invitarnos a Hawai de vacaciones o regalarnos un cinto de piel de víbora de cascabel, pueden hacerlo en churrosypalomitasonline.blogspot.com donde siempre estamos felices de saber que tenemos lectores.
¡Aviso de Última Hora! Nuestros lectores de la “vieja guardia” sabrán que Churros y Palomitas era la sensacional sección que se publicaba a veces lo miércoles y a veces no. Pues con la novedad de que ahora podrán leernos nuevamente ese día, para que ya no tengan que buscarnos toda la semana.

10 de septiembre de 2006

Bolsas sin Palomitas

Tengo que reconocerlo. La invitación para la inauguración de la próxima muestra internacional de cine es simple y sencillamente sensacional. ¿A quien se le hubiera ocurrido que una bolsa vacía de palomitas tendría tan bonita presentación para este tipo de eventos? Y a eso agréguenle el hecho de que la bolsa te la llenan con palomitas al entrar al cine, es simplemente sensacional.

Se acerca la Equis Ele Uve I I (osease cuadragésima séptima) Muestra Internacional de Cine y debo confesar que las películas que vienen están En el hoyo… y en El faro…. Y en la Próxima Salida…. Y en varias más que tendremos el placer de tener en cartelera durante un par de semanas en las que los fanáticos del cine podremos ver cosas no tan comerciales (y algunas tan horrorosas como la cosa esa de Buza Caperuza, donde los productores y el pésimo doblaje pretenden hacérmela creer que Glenn Close y Omar Chaparro tienen el mismo talento).

Hablando de cosas más alegres, y gracias al trabajo realizado tanto por CONACULTA, la Cineteca Nacional, el Instituto Cultural de León, Cinépolis y Corona (ojala que también vendan cervezas bien frías en el cine) es que este viernes primero de septiembre llega a nuestras pantallas una buena cantidad de películas, entre las cuales hay varias por las que me moría de ganas de verlas.

La muestra inicia con la representante española dentro de la muestra, Princesas. La película dirigida por Fernando León de Aranoa (tal vez alguien lo recuerde por Los Lunes al Sol) es una bonita historia acerca de la amistad y el amor… en el mundo de la prostitución española. Una propuesta interesante, considerando que muy pocas veces en un filme se nos da un insight acerca de las chicas que se dedican a esta profesión (y a final de cuentas por algo se escogió inaugurar la muestra con esta película.

Por parte de nuestro continente también hay varias producciones, desde la co producción peruana, cubana, argentina y española (cual mole de todos los chiles) nos llega Doble Juego, una comedia mas negra que Johnny Laboriel donde los engaños, las tretas y los enredos juntan a siete personajes que se asocian simplemente para buscar sus fines personales.

Pero, ¿México tenía algo digno de mostrarse? Llámenme racista pero la mera verdad las producciones nacionales no han sido de la mejor calidad desde que… desde que… desde hace un buen rato. Sin embargo tenemos El Cielo dividido del director Julián Hernández nos narra una bonita historia de amores y desamores de una pareja gay, donde el redescubrimiento de su relación se da de maneras muy particulares. El buen Julián es más conocido por ser cortometrajista y haber ganado por uno de sus trabajos el Oso Tedy de Berlín (no es broma, así se llama el premio… luego se quejan de que mi premio del Capullo de Bichito en el Festival Internacional de Cine Geografías Suaves por mejor corto de ficción tiene nombre pirata, al menos no tiene nombre de juguete).

Pero no todo en el cine mexicano es sacar historias que escandalicen, traten de temas tal vez lejanos u obscuros, gracias a Dios mi ticher Juan Carlos Rulfo nos honra con su documental En el Hoyo. Es un documental, pero antes de que empiecen a roncar o a quejarse (que flojera ver documentales) recomiendo ver algunas de las obras anteriores del buen Juan. Después de todo su último trabajo Del Olvido al No me Acuerdo es una de las historias más humanas y mas emotivas que el cine mexicano ha dado… y es documental. Con su estilo tan interiorizante (sin ser intrusivo) el buen Juan nos muestra la historia de los trabajadores envueltos en el desarrollo de la construcción del segundo piso del periférico. Sus sueños, sus vidas, sus ilusiones, su humor, todo esta plasmado de manera tan magistral que nos acerca de una manera inesperada a quienes hicieron posible la realización de una obra tan monumental. Sin ninguna pretensión política (ojala y Luis Mandoki aprendiera algo de Rulfo) la visión presentada es algo que debe de verse sin dudarlo. Dicho documental (ganador entre otras cosas del Premio del Jurado en Sundance y del Premio por Mejor Documental en el Festival Internacional Karlovy Vay) será el encargado de cerrar (con broche de oro) esta Muestra Internacional. No se la pierdan.

Recuerden que si quieren escribirnos, invitarnos al cine, picharnos unas palomitas o solo expresarnos sus comentarios, pueden hacerlo en churrosypalomitas@yahoo.com.mx donde siempre estamos felices de leer a nuestros lectores.

La Inescrutable Experiencia Cinematográfica

Son las 10 de la mañana de domingo. Don Palomito platica con su amigo, el señor Churro (al cual le dicen así no por que sea bien “pacheco”, sino por que le encantan las películas folclóricas e inverosímiles… y piensa que “Snakes on a Plane” / “Serpientes en un avión” será la mejor película del año). Don Palomito, a quien le encanta ver comedias y películas entretenidas (léase “palomeras”) le comenta:

Don Palomito: Me duelen las rodillas, la espalda, el riñón y hasta las uñas de los pies... ¿crees que esté enfermo?

Don Churro: ¿Y ya te juiste a checar con el médico, compadre?, ¿Desde cuando te empezaron esas dolencias?

Don Palomito: Pos para serte sincero... todo empezó un día, una tardecita que no tenía nada que hacer y me encaminé al cine más cercano, hice la democrática fila, pedí mi boleto para Golpe de suerte con MI Lindsay Lohan, me dispongo a ver la película, previa media hora de trailers absurdos e insultantes como el de Amanda Bynes haciéndose pasar por hombre en “Una chica en apuros” o Salma Hayek en algo que se llama “Pregúntale al viento”. El caso es que como parte de la preparación para ver a MI Lindsay y pensando que ya había visto lo peor, no tienes idea el dolor de hígado que me dio ver a la nueva diosa de Hollywood en algo que ni como ayudarle... Golpe de suerte es mala como pegarle a tu mamá...

Don Churro: Yo por eso, pa' cuando se que las películas me pueden defraudar, voy con alguna de mis malas mujeres pa' que me hagan compañía… Así de perdida no salgo aburrido. Aunque déjame decirte que de repente lo que debería ser casual y sin complicaciones se convierte en todo un ritual que parece planeado por nuestros ancestros prehispánicos. Eso de llevarme una bella doncella la cual se postrará conmigo en el centro de la sala (desde donde se ve y se escucha mejor el asunto), y ataviarla con su cubetota de palomitas, los nachos para empezar, la cocota de 2 litros, los chocolates (por si se antojan después) y la nieve que tienes que rezar para que no se te derrita a media función… y eso es solo lo que me trago yo. Falta comprarle su botellota de agua y botanas “lait” para la chamaca… y de ahí a esquivar señoras con sus 7 chamacos gritones acomodados en las orillas de los asientos y demás obstáculos que hacen que se convierta en un logro ver una película.

Don Palomito: ¿Y que tal la ilustre maestra que lleva a su grupo de la secu no. 37 a ver al Brad Pig en Troya? "…y ahora viene cuando Paris se roba a Helena, la mujer más bella de la tierra conocida" " y ahora aparecerá cuando Aquiles muestra que la visita a Neoskin valió la pena" La doncente, pensando que iba a ver todo un tratado de historia para ahorrarse la clase en el aula, lo que realmente vio fue que Brad Pig es muy malo cuando no se le sabe dirigir o que su bronceado era más falso que Gloria Trevi.

Don Churro: Así pasa cuando sucede, mi estimado Don Palomito. Pero pos a poco no es requete bonito cuando uno se emociona viendo películas. Como esa que se estreno hace poquito con el buen Nacho Libre. Mira que aunque está hecha con gringos y les fallaron cosas que cualquier asistente regular al domo sabe bien de nuestro heroico deporte, me emocione bien harto cuando se lanza sobre las cuerdas y vuela Nacho cual ángel del pancracio para caer sobre el mendigo desgraciado enmascarado contra el que estaba luchando. O cuando vemos al chino este Yet Li peleando contra bien muchos artemarcialistas en esa película del “Sin Miedo” o “Fearless” dando golpes, patadas y patines a diestra, siniestra y Briviesca. Es de lo que hace que valga la pena ir a la pantallota a pesar del alto costo de la vida.

Don Palomito : Eso que ni que… Igual de re bonito como cuando el audio se desfasa, y parece que estamos viendo el doblaje de los Ricos también lloran en ruso, o cuando (¡aghhhhh) la imagen está alargada o los subtítulos y las cabezas cortadas. En fin, esto me ha hecho recordad que lo que mas me gusta del cine es precisamente el ritual de ir al cine. ¡Que vivan los mocosos gritones! ¡Que vivan los cachondos que van al cine para ahorrarse lo del motel! ¡Que vivan las mamás ahorrativas que mandan a los escuincles con sándwiches y cocas escondidas en el pantalón por el bien de la economía familiar! ¡Que viva la creme de la creme del miércoles de 2 x 1! ¡Que vivan los que se paran a aplaudir y a pedir otra… otra cuando la película les gustó! ¡Que viva Lindsay Lohan!

Llenos de ánimo y energía, Don Churro y Don Palomito se levantan y deciden ir a manifestarse… en el cine y ver los estrenos para luego platicárnoslos a todos nosotros. Recuerden que si quieren escribirnos con sus quejas, sugerencias, comentarios, invitaciones a tomarnos un café o decirnos el remedio para los males ocasionados por las malas películas, pueden hacerlo mandándonos un correo a churrosypalomitas@yahoo.com.mx o escribiéndonos un comentario en nuestro blog en http://churrosypalomitasonlain.blogspot.com/ donde siempre estamos felices de leer a nuestros lectores.